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La buena alimentación contribuye a la seguridad en el empleo
Contar con pocos ingresos puede hacer que los trabajadores agrícolas compren comida barata, rica en calorías, con pocos nutrientes y sobrecargada de grasa, azúcar y almidones. El resultado de una alimentación como esta puede ser obesidad y desnutrición a la vez. Ambos factores afectan la capacidad de los trabajadores del campo para proveer el sustento a sus familias. Los trabajadores obesos tienen el doble de probabilidades de no presentarse a trabajar que los que están en buena forma. Los trabajadores desnutridos tienen menos fuerza, energía y resistencia contra enfermedades que los trabajadores bien alimentados. Los latinos en California sufren de manera desproporcionada de problemas de salud, lo que puede deberse a bajos ingresos, falta de educación acerca de la nutrición y la falta de seguro de salud y atención médica. Ellos tienen más probabilidades de desarrollar ciertos tipos de cáncer y morir de esa enfermedad que los anglosajones. Consumir una alimentación saludable puede ayudar a prevenir el cáncer, la diabetes tipo 2 y otras enfermedades. Los alimentos sanos usualmente cuestan un poco más. Una manera de hacer rendir más su dinero y disfrutar de una alimentación más saludable es comprar menos alimentos poco nutritivos, y usar todo su presupuesto de alimentación en comidas que contribuyen a gozar de buena salud. Cocine en casa en vez de ir a restaurantes de comida rápida. Al comprar comestibles, evite los costosos alimentos empacados que usualmente se ofrecen en los anaqueles ubicados en los pasillos centrales del supermercado. Llene su canasta de compras con frutas y verduras frescas de temporada, carnes y productos lácteos con poca grasa, y panes y tortillas de granos integrales. Comer estos alimentos es mejor para toda la familia. Le darán más vigor, energía, y le ayudarán a evitar enfermedades y a sentirse mejor. |
